Vamos a intentar que descubráis un poquito más la costa oriental asturiana, dejando fuera la autovía, salvo para el retorno a casa. Es una ruta muy amplia, podremos profundizar más adelante en algunos tramos.
Playas agrestes y vírgenes
Saldréis de la casa de aldea La Labriega dirección Este hacia vuestra derecha en la N632 y tras dejar atrás La Isla, veréis a vuestra izquierda la Playa de La Espasa y su Venta de Peregrinos. De construcción tardomedieval, alojó el ilustrado Gaspar Melchor de Jovellanos.
Al cruzar el puente sobre el río Espasa os recibe el concejo de Prado (Caravia).
Dividido en Duesos y Prado, Caravia Baja y Caravia Alta. En Caravia Baja, al lado de la parroquial de Santiago, tenéis la estela de Duesos, un ejemplo de relieve céltico astur.
Al llegar a Caravia Alta, a la parroquial de La Consolación, tomaréis el desvío que nace a su lado hacia vuestra izquierda. Bajaréis a la playa del Arenal de Morís, una de las playas más agrestes y vírgenes que quedan en Asturias.
De vuelta a la N632 dejando atrás Caravia y su primera estribación montañosa La Forquita, precedente de la Sierra del Sueve, cruzaréis el pueblo de Berbes.
Tras dejarlo atrás a unos 2km comenzaréis a ver a vuestra izquierda de nuevo el mar, y unos riscos escarpados de gran belleza. En ellos nacen eucaliptos entre la roca cuarcítica que fue siendo horadada por el Arroyo del Acebo.
Este río sigue su curso hasta desembocar en la playa de la Vega, un gran sistema dunar de gran valor ecológico.
Una vez abandonado Vega y de nuevo en la N632 cruzaréis Torre y San Esteban de Leces, con el torreón de los Junco y la parroquial de San Esteban enmarcando la carretera.
Desde ahí ya alcanzáis con la vista el estuario del Sella y la villa a la que da nombre, Ribadesella, con su ermita de la Virgen de la Guía custodiando la entrada del mar en la ría.
Acantilados de bufones y “bramadorios”
No pararemos ahora en Ribadesella. Una vez cruzado el puente, girado a la derecha y a unos 150m tomar desvío a la izquierda por la AS263. Os conducirá hacia los acantilados de Arra, tras dejar atrás Ribadesella y llegar a Orellana y su campo de fútbol y continuar bordeando los pueblos de Collera, Camango, Toriello, Cuerres.
Antes de llegar a Belmonte, tomar el desvío hacia Llames de Pría y Garaña de Pría a vuestra izquierda. En Llames os acogerá la playa de Guadamía, donde desemboca el río del mismo nombre.
Entre esta localización y Garaña disfrutaréis de una ruta de acantilados y Bufones de impresionante belleza.
Los bufones son cavidades cársticas por las cuales su cuela el mar y surge en la superficie a presión, a modo de géiseres. El Bramadoriu, no os dejará indiferentes.
Desde Garaña hacia Villanueva, encontraréis la playa de La Canal, un tajo en la roca de dimensiones longitudinales y curiosa morfología, los acantilados calizos no dejarán de sorprenderos.
Saldréis dirección Nueva retomando la AS263 llegaréis a Nueva de Llanes.
Os acoge un típico pueblo de sabor asturiano y construcciones indianas deudoras de los caudales traídos de América por la emigración.
Podréis acercaros a dos playa de singular belleza, la playa de Cuevas del Mar, y la playa de San Antonio.
En Cuevas del Mar, la bajamar deja a la vista un conjunto de grutas y arcos naturales de roca de bellos tonos. La playa de San Antonio, destaca por ser una coqueta cala igualmente muy bonita.
Playas singulares y castros
De Nueva iréis hacia Ovio, Cardoso, Hontoria, Villahormes y Naves, donde están la playa de Gulpiyuri y la de San Antolín.
La primera alejada de la costa, recibe el agua marina por medio de una sima que emerge en una pradería, siendo considerada monumento natural y una de las playas más singulares del mundo.
La de San Antolín, bello arenal al lado del Monasterio benedictino del SXII de San Antolín de Bedón.
Toranda, Torimbia, Porrúa…
Estáis ya al lado de Posada de Llanes, y os desviaréis hacia Niembro y allí ver sus playas de Toranda y Torimbia, ésta última simplemente espectacular.
En Niembro su bahía, donde con la marea alta la iglesia y el cementerio de corte romántico se reflejan en las aguas jugando con un reflejo de particular belleza y serenidad.
Ese es el cementerio donde se rueda “El Abuelo” película de José Luis Garci.
Estáis ya al lado de Celorio, donde antes de llegar al pueblo os desviaréis hacia la izquierda par ir hacia Porrúa, Premio Príncipe de Asturias al Pueblo Ejemplar de Asturias 2005.
Sabor a etnografía
Podréis visitar el Museo Etnográfico del Oriente de Asturias, donde haceros con una idea muy palpable de lo que fueron los usos y las costumbres de nuestros pueblos en un pasado no tan lejano.
De igual manera contemplaréis el ejemplar de aguacate más grande del mundo, traído de México en 1906.
De ahí volveréis hacia la carretera que os traía de Posada, para pasar al lado de Celorio.
Un poquito más adelante llegaréis a Poo, con una playa de finísima arena blanca que se excava en la roca, quedando como una gran piscina natural.
Costas irrepetibles
Podéis caminar 5 o 10 minutos desde el aparcamiento, subiendo por el camino al lado de unos cipreses que os acercará a los acantilados y a la bocana del mar, con vistas a los islotes que salpican la costa, los castros de Poo.
Vadeando el extremo sur de la playa, y tomando la senda que cruza el río La Vallina, acercándose entre prados a la isla de Poo. Es el paraje de “El Portiellu”. Desde esas alturas se ven bien los islotes, que aquí llamamos castros: castro de Poo, Pelau, San Martín, Gaiteru y Amielles.
Os llevará la senda hacia los parajes de las playas de La Alameda, Portiellu de San Martín, y San Martín, salvajes, maravillosas, y con restos arquitectónicos de una edificación religiosa al borde del acantilado.
Llanes
Poo es la antesala de Llanes, la Puebla de Aguilar medieval, y cuna de los afectos de quien os redacta este itinerario. En Llanes todo es bonito salvo la masificación de gente.
Primera Puebla de fundación real de Asturias hacia 1206 por Alfonso IX y con una gran presencia en la Historia como en las historias que la han ido conformando.
No perderos su entramado gótico
Cuna de emigrantes, debe a estos gran cantidad de palacetes, palacios, su casino y otras obras civiles. La Basílica gótica de Nuestra Señora del Conceyu es la única de la cristiandad que no pertenece a la Iglesia en origen. Se sufragó por los habitantes de la villa en su integridad, comenzada hacia el 1240 y terminándose hacia 1480.
La calle Mayor es la calle que da acceso al barrio gótico con Palacios como el de los Duques de Estrada , Gaztañaga, el Cercáu etc.
La Playa del Sablón se abre entre las murallas medievales y el Paseo de San Pedro, desde donde podéis llenar tanto retinas como pulmones y dar descanso al espíritu.
En el puerto encontraréis los Cubos de la Memoria, obra de Agustín Ibarrola y a su lado el Fuerte, bastión defensivo de la antigua Puebla de los ataques piratas.
Una colina sobre Llanes os muestra la ermita almenada de Ntra. Sra. La Virgen de La Guía, desde donde se divisa Llanes, su costa oriental y las estribaciones de la sierra del Cuera, la Sierra de la Borbolla, y la singular cala de Puertu Chicu.
Desde Llanes os conduciréis hacia Toró, playa de gran renombre y de ahí hacia los pueblos de Cue y Andrín. Entre ambos os espera el Mirador de la Boriza, con panorámicas de las playas de Ballota (izquierda) y Andrín (derecha).
Sus vistas merecen ya con mucho el haber recorrido estos kilómetros llenos de rincones por descubrir.
Quedan muchos, y sensaciones de libertad y hallazgos, que mil veces que hagáis, mil veces os reportarán esos sentimientos.
Otro Pueblo Ejemplar y más Historia
Para terminar de entender nuestra Historia tan llena de historias, os podréis acercar a Columbres, Premio al Pueblo Ejemplar de Asturias de la Fundación Princesa de Asturias 2015.
De singularidad indiana uno de sus mayores exponentes es a La Quinta Guadalupe, el Archivo de Indianos de Asturias, donde veréis un ejemplo de cómo era la emigración a América de las gentes del Oriente de Asturias.